La publicidad y la política funcionan igual: convencen a través de las emociones. Ya han descubierto hace tiempo que intentar persuadir a través de la razón no tiene mucho éxito. Somos lo suficientemente inteligentes como para saber lo que no queremos. 

Los inicios de Space X, la compañía espacial de Elon Musk, fueron complicados. Todos los lanzamientos acababan en fracaso. Pero lejos de desanimarse, el equipo supo aprender de los errores y crear una de las compañías más increíbles de nuestros tiempos. Plantearse cualquier proyecto desde el punto de vista del error puede ser mucho más interesante que buscar la perfección. 

Las gotas de agua son redondas porque es la geometría más eficiente, la que consume menos energía. Y tú, ¿quieres ser gota de agua o un polígono con mil aristas? 

El miedo nos mueve y nos bloquea. El miedo, ese sentimiento horrible… Espera, ¿horrible? Después de escuchar este episodio quizás miras al miedo con otra cara.

Madruga, haz deporte, come sano, dúchate para no oler mal, corre al trabajo, no gastes mucho dinero, paga tus facturas, conduce con cuidado, cumple las reglas sociales y no te vayas tarde a dormir que mañana hay que volver a madrugar.

Voy a hacer una empresa que va a ser como Amazon pero de alquilar. Tu pides un taladro, te lo traen, lo usas y al día siguiente vienen a recogerlo. Imagina la huella de carbono que nos evitamos si alquilamos todas esas cosas que casi no usamos! 

Hoy hablamos sobre la posibilidad de que comiences a invertir tu dinero en activos, como acciones o inmuebles, y de por qué deberías hacerlo ya. El dinero es un pasivo, aunque no te lo parezca. 

Me da mucha pena ver cómo treinta años después seguimos enseñando a nuestros hijos con los mismos mierda de baremos. Somos incapaces de darnos cuenta de algo que marcaría la diferencia: todos somos diferentes. 

A veces cuando miramos atrás juzgamos nuestras decisiones desde el presente y somos demasiado duros. En esta filosofada te cuento cómo creo que no hay decisión mala, sino herramientas insuficientes.

Hay una idea muy extendida de que cuando compras caro compras calidad, pero esto no es siempre así. Escucha estos ejemplos y no caigas en la trampa: más caro no es siempre mejor. 

Cada vez que quieras comprar algo con todas tus fuerzas, date una semana. Te darás cuenta de que, habitualmente, cuando pasa una semana, ya se te han pasado las ganas de comprar eso que te emocionaba tanto.

Cuando compras algo con descuento no ahorras, sino que pagas. Tu cuenta bancaria no entiende de ahorros, solo de gastos, eso es lo que cuenta a final del mes. Un descuento está bien solo cuando necesitas comprar eso que está rebajado.

Esta norma universal es aplicable a cualquier cosa que compres: nunca acabarás de pagarlo del todo. Piensa en ello cada vez que compres algo, y no te pierdas estos ejemplos para que no te pase a ti lo mismo. 

Añadir tus tareas a una lista es lo más absurdo que puedes hacer. ¿Para qué la necesitas si al final vas todos los días a tope, sacando adelante nuevos marrones sobre la marcha? En lugar de la lista de tareas, haz esto.

En la tercera parte de nuestra charla con Rubén López de Miguel hablamos de inversión inmobiliaria. Después de escuchar este episodio vas a querer empezar a comprar casas. ¿Es el sector inmobiliario una inversión segura?.